En algunas ocasiones hemos recibido a clientes desesperados porque la comunidad de propietarios no hace nada para solucionar cuestiones que les afecta a ellos y que están provocando un perjuicio originado por el incumplimiento de otro comunero (Por ejemplo el cierre de un patio comunitario o de un balcón). Básicamente se quejan de la pasividad de los órganos de la comunidad.
Ante dicha situación, hay que realizar una serie de advertencias ya que el Tribunal Supremo mantiene una doctrina restrictiva respecto a la forma de canalizar el ejercicio de las acciones judiciales en beneficio de la comunidad. Dicho tribunal considera que es a través de la junta de propietarios, en la persona de su presidente, como se debe actuar. Por tanto solo en determinadas circunstancias, y cumplidos unos requisitos, el propietario tiene legitimación y capacidad para poder ir por su cuenta contra otro comunero si incumple normativa de propiedad horizontal.